No quiero que acabe

Firmaría por perderme un rato más en los huecos de tus caderas.
Escalando tus costados,
notando tus estremecimientos provocados
por mis cosquillas y... algo más.


Aceptaría volver a rodar entre tus brazos.
Que me comas a besos y que sonrías con cada uno de mis suspiros.

Dejar caer todo mi peso sobre tu cuerpo...
Sentir como el espacio que nos separa desaparece.
Dejarte tendido en la cama y escaparme
con tu olor prendido en el pelo...

No quiero que esta locura acabe.

Mi motivo

Mi mejor y más sólido motivo eres tú.


TÚ

Estacionalidades...

Las bicicletas son para el verano...


...y los amores para todo el año.

Inevitabilidades

Esas pequeñas gotitas se amontonaban
en los recovecos internos de mis ojos.

Las lágrimas se amontonaban,
a punto de rebosar la máxima
capacidad de contención.


Y sucedió.
Las primeras, comenzaron a asomar
y a descender ordenada,
pero seguidamente,
el trayecto que las uniría con mi barbilla.

Ondeando a la altura de las mejillas...

Inversiones...

Vamos a revertir los dichos
y vamos a hacerlos nuestros.

Si antes era:
"Vísteme despacio que tengo prisa..."
Ahora será:
"Desnúdame deprisa que tengo tiempo..."


;)

pequeñas cosas

Que vivan los viernes, los helados almendrados,
los pintauñas de colores, la música de Pereza y
los anuncios de Estrella Damm.

Que vivan también los conciertos en directo,
las noches de verano,
esa foto que tienes de cuando eras pequeño que te encanta,
las rebajas.

Que no se acaben las patatas fritas,
la ilusión de ser feliz,
las ganas de enamorarse,
las sonrisas, los amigos,
la familia.

Que no se olvide nunca el primer beso,
el primer amor, la primera desilusión
y aquella primera vez que montaste en bici y no te caíste.

Adoremos los besos de despedida y de reencuentro,
los viajes, las caricias y los abrazos.
Las miradas de complicidad.

Nunca dejes todas estas pequeñas cosas,
porque al menos a mí, me mantienen viva.